EDUCACIÓN, IDENTIDAD Y PAPAS FRITAS BARATAS
/ Clase 16-4-2019
Podemos resumir en el cuadro parte de la observación que realiza el autor, Michael Apple, en su estadía en un país asiático, cuando viajando por la ruta junto a una colega, registra campos enteros desprovistos de humanos y ve la iteración de carteles pertenecientes a una multinacional proveedora de comida chatarra. Es en el discurso de su compañera, y ante la pregunta de si existen estos locales de comida por la zona, que pone de manifiesto la relación entre la falta de educación, servicios de salud y la producción de papas fritas baratas.
El autor no termina de comprender este vínculo hasta que en el relato de su compañera, entiende la grosera explotación de las tierras por parte de capitales e inversión extranjera. Instalando maquinarias para la producción y manufacturación de la papa, se desplaza a la mano de obra, que fue la primera intención por la cual ésta inversión tuvo acceso a dicho país, solamente que eximidos de impuestos y sin control del Estado, pues el país está bajo un régimen militar, los primeros trabajadores, mano de obra barata descartada, se desplazan a la periferia de las grandes ciudades en busca de algún tipo de subsistencia.
En estas ciudades son invisibilizados, la pobreza pasa ser parte de un decorado molesto pero inevitable, las personas forman parte de una población sin registro, inexistente en lo legal, fantasmagórica, desde el lado del que no tiene, potencia la brecha entre el que si accede al consumo de bienes y el que no.
El capitalismo voraz entonces, se frota las manos y disfruta de estas brechas evitables, sus manos codiciosas y corruptas, ventajeras e insensibles, separan brutalmente al que sí y al que nunca…Nunca accederá a un trabajo digno, servicios de salud, seguridad, jubilación, techo, etc. El capitalismo le palmea la espalda al explotador, lo alienta y juega a su favor. Inevitablemente, los países hegemónicos se benefician de estas prácticas pues disfrutan de productos a muy bajo costo y rara vez se cuestionan el por qué…costo que sin duda, pagan los explotados, los fantasmas, un costo carísimo en el que les va la vida.
Para concluir, incluímos un texto de Galeano que nos parece interesante compartir…
"Un pajarito me contó, que los hombres estamos hechos de Hstorias"
Con la emergencia de los movimientos étnicos-sociales, los grupos históricamente silenciados están rompiendo el mapa hegemónico del conocimiento que hace del Tercer Mundo un receptor de valores, premisas, conceptos, teorías, modelos, paradigmas, etc., creados por “otros actores” en “otros lugares”.
Ellos ya no aceptan que lo válido, relevante o verdadero sólo está presente en ciertas lenguas y viene sólo de ciertos lugares.
Esta dominación epistémica influencia la forma de ser, sentir, pensar y actuar hasta de intelectuales progresistas que afirman pensar sistémica y críticamente la sostenibilidad del “desarrollo”.
En sus prácticas discursivas, ellos no cuestionan al “desarrollo” mismo, solamente a sus adjetivos calificativos, reproduciendo siglos de hegemonía epistémica eurocéntrica.
Este trabajo es una deconstrucción de la idea de desarrollo; una invitación a la descolonización del pensamiento eurocéntrico, contribuyendo con:
Un marco interpretativo desde una ética de la indignación con imperialismos antiguos y nuevos, quitándoles la máscara de cordero que oculta el rostro de lobo del “desarrollo” como hipocresía organizada para la dominación.
Un marco histórico de esta hipocresía durante el colonialismo imperial y en el actual imperialismo sin colonias.
Un marco ético para inspirar nuevos esfuerzos hacia la construcción de otro futuro, posible y necesario, donde la injusticia imperial no florezca y la felicidad de la mayoría sea una posibilidad.
Su conclusión es un epitafio para la idea de desarrollo por organizar la hipocresía y legitimar la injusticia.
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